[De Mikel Itulain] La imagen del «horror», una portada de Time de agosto de 1992, corresponde a un supuesto campo de concentración serbio en Bosnia durante la guerra en Yugoslavia en los años 90. Hoy en día sigue siendo utilizada como arma arrojadiza y acusatoria del supuesto nuevo holocausto provocado por los serbios, sin pararse a pensar que forma parte del amplio historial de la propaganda de guerra y la utilización espúrea de la ignorancia y de los manipulables sentimientos de la gente.
Si el público tuviese más memoria y conocimiento sabría que este tipo de campañas siempre aparecen cuando se quiere desatar la guerra. Sin odio y tipos a los que odiar no hay contienda que valga y que tenga lugar. Ya desde la Primera Guerra Mundial, donde se perfeccionaron estas técnicas de engaño y de creación de histeria colectiva en los Estados Unidos, se decía lo mismo y no se aprende. (EsPosibleLaPaz)