[De Pedro García Hernández] La realidad demuestra que destruir a Siria como Estado y aprovechar su posición geográfica de puerta que abre caminos desde Asia hacia Occidente es de manera innegable una disputa por el control, exploración y subsecuente explotación de las vastas reservas de gas, y en el Mediterráneo oriental y en 31 áreas que abarcan las costas de Chipre, Egipto, Turquía, Israel, El Líbano y de esta nación del Levante. (
Prensa Latina)