Desde Italia hasta Gran Bretaña, desde Francia hasta Alemania, en todos los países europeos «ricos» ha habido una carrera hacia la mano de obra barata para la inminente campaña de recolección en el campo. Y así la política de «puertos cerrados» encuentra otra excepción para atraer a masas de desempleados de Europa del este: ¡la temporada de explotación está más abierta que nunca! (izquierdadiario.es)
«Alemania: comienzan a llegar miles de trabajadores como mano de obra barata para las cosechas»
Al igual que Gran Bretaña, Alemania depende de la importación estacional de mano de obra extranjera para recoger muchos de sus cultivos, lo que permite a los productores pagar salarios más bajos e imponer a los trabajadores peores condiciones de las que tolerarían los ciudadanos. (insurgente.org)