quarta-feira, 5 de julho de 2017

«375 años de cárcel por una fractura de tobillo»

[De Jimmy Muelles] Recuerdo a guardias civiles de paisano en fiestas de Ordizia, completamente borrachos. Robaron una bandera de la CNT en la txozna. Luego fueron al gaztetxe mientras rompían vasos por la calle, se orinaron en el interior del local, y ondeaban la bandera mientras gritaban «viva españa» y «viva la guardia civil». Se les cayó la pistola al suelo y toda la gente huyó asustada. Testigos afirman que en otro bar encañonaron a unos vecinos mientras les amenazaban con bajar al día siguiente, esta vez de uniforme.

Tendría yo quince años cuando hubo una redada de la guardia civil en el pueblo, «a lo grande», entraron como si fuera una emboscada militar, como si hubiera un estado de sitio. Salían deprisa de sus todoterrenos e iban por el pueblo identificando absolutamente a todo el mundo. Una anciana que iba a por el pan, un niño sacando al perro, una pareja de enamorados, etc. Daba igual, todo el mundo era sospechoso. A mí me pararon con un par de amigos y me interrogaron por un parche que llevaba del grupo «Boikot», en el que salía una estrella roja. Recuerdo que nos preguntaron si éramos proetarras. A mi hermano aquel día lo «escoltaron» hasta casa porque no llevaba el DNI encima. (BorrokaGaraiaDa)