segunda-feira, 29 de fevereiro de 2016

Jesús Jiménez Cabello: «La "vaskitis" siempre vuelve»

El sábado asistí con el SAT a una concentración frente a la cárcel. Estaba organizada en el marco de la salida desde Euskal Herria de setenta y cuatro autobuses dirigidos a decenas de cárceles distribuidas por todo el estado español. En la de Córdoba, tuve la oportunidad de vivir algunos momentos y de percibir un ambiente especial que no había vivido nunca.
[...] Como les dije a algunos, son bienvenidos siempre que quieran venir, pero que la próxima sea una visita por gusto, y no una paliza de 24 horas seguidas de autobús para tener que ver a un familiar presos a casi 1000 kilómetros de distancia. (BorrokaGaraiaDa)

«¿Golpe de Timón? Delirios desde una balsa a la deriva», de Chris GILBERT (redroja.net)
En un consejo de ministros en octubre 2012, meses antes de morir, Chávez propuso un golpe de timón. Desde aquel momento la consigna cobró vida en diversos contextos: escuchamos reclamos convocando a un golpe de timón del ejecutivo y especulaciones sobre posibles virajes a la izquierda o a la derecha. También encontramos organizaciones convirtiendo la frase en su consigna central, otras que la han asumido como nombre. Pero sobre todo, innumerables voces se preguntan por qué Nicolás Maduro no ha dado un golpe de timón (interrogación implícita en un reciente artículo de Luis Britto García).