[De Borroka Garaia] Cuando Liki deja grabado bietan jarrai no se está refiriendo exclusivamente a que la inteligencia debe guiar el accionar revolucionario, sino que está hablando de una dualidad. O mas bien de unas cuantas. Para Liki ni los intereses particulares ni las ideologías estaban por encima del pueblo. El pueblo está primero y las ideologías le sirven. Se enroscan en él. El hacha no simplemente es contundencia y dureza, para Liki también significaba el pueblo vasco y su lucha ancestral por la supervivencia. La serpiente no simplemente simboliza lo sigiloso y la inteligencia sino la acción viva y colectiva frente al individualismo que al enroscarse en el pueblo logra sus objetivos. En realidad Liki contaba muchas cosas. Habla también de piedra y de herensuge.
Félix Likiniano estaba dejando un mensaje que se pierde en la noche de los tiempos hasta hoy. Su sueño y el de otros muchos y muchas. Hacer la revolución en Euskal Herria.
Ciertamente aún no se ha hecho la revolución en Euskal Herria. Tampoco somos independientes y ni siquiera contamos con el derecho de autodeterminación. La burguesía vasca y española, o mejor dicho la burguesía española y su gustosamente dependiente vasca, siguen dominando todo el entramado social, y haciendo buen negocio de ello. La clase trabajadora vasca cada día es un poquito más dependiente y está un poquito más empobrecida.
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Cómo llegar a un contexto de paz con justicia va a necesitar de recuperar el verdadero significado de la paz y de la justicia, que son palabras que los poderosos han robado. Rechazar activamente todo proceso de asimilación política, resituar lo que significa un verdadero proceso de paz, saber explicar bien las razones de porqué no existe y tener presente que la paz en realidad no es algo que se construya en bases injustas sino que es consecuencia de un proceso de justicia que asienta su base.
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En todos los conflictos políticos en primera y última instancia lo que se superpone es la balanza de poder. La ventaja en la balanza de poder es lo único que puede desbloquear una situación dada. En el caso vasco esa fuerza significa proceso constituyente de estado , proceso hacia el socialismo, poder popular y confrontación, mucho más allá de lo electoral entrando también en el terreno de la desestabilización política. (BorrokaGaraiaDa)