[De Borroka Garaia] Claro que lejos de ser la clave es una de las piedras más grandes en el camino salvo para los que aún no se han dado cuenta que la obcecación en la «vía maltzaga» está llevando a morder el polvo al independentismo y a erosionar continuamente las expectativas de un futuro independiente que no va a partir de acuerdos institucionales autonomistas y bilaterales con el estado sino de una explosión popular y una construcción nacional y social confrontativa que mande al pasado al «viejo independentismo autonomista» y a todo su viejo o reformado entramado institucional.
Y los y las protagonistas de ello serán por fuerza todas esas capas sociales que están sufriendo en sus carnes el cada vez más siniestro ataque capitalista contra la clase trabajadora vasca. Ese será el nuevo independentismo que necesitamos y contará con su propio paradigma forjado en la lucha. Nada que ver con conciertos, cupos, foralidad, unión europea o autogobierno autonomista, es decir, que no podrá responder a los intereses de la alta y mediana burguesía vascongada ni a las facciones de la pequeña que les siguen por detrás. De lo contrario, la independencia de Euskal Herria será algo del pasado que los viejos abertzales, ya muertos, un día defendierón para nada. Y eso no va a ser así. (BorrokaGaraiaDa)