A día de hoy, con la palabra democracia en boca de todos los políticos del estado español y francés, presumiendo de ella, pero no aplicándola, quiero mandaros un abrazo desde Euskal Herria. A vosotros que no habéis dispuesto de las posibilidades y garantías de defensa, en un juicio justo.
Juzgados con leyes que no corresponden a las propias de un estado de derecho y democrático, mediante las cuales habéis sido condenados. Juzgados por un tribunal de excepción, predominando lo policial sobre lo judicial, habéis sufrido incomunicación total en vuestras detenciones, fuisteis torturados, pusieron todo tipo de trabas a vuestros abogados, con la dispersión os castigan a vosotros a vuestros familiares y amigos quebrándo su economía y salud, hacen caso omiso a vuestras denuncias de torturas, riéndose de las condenas del Tribunal Europeo de Derechos Humanos. (lahaine.org)