[De Guillermo Paniagua, militante da Askapena] A modo de conclusión y de merecido homenaje a Catalunya, nos queda dejar la palabra a quien le corresponde. Unas palabras extraídas de una lectura de Endavant en la que se exponía argumentos a favor de la posición que resultó ser, tras el conocido desenlace, tan valiente como realizable. Unas palabras que, hoy en día, siguen definiendo desde un inapelable pragmatismo revolucionario las verdaderas coordenadas del debate. Esperemos que, al menos, logren estimular nuestra reflexión:
«El debate no es entre independencia o socialismo. El debate no es elegir entre la libertad nacional o la revolución social. Nuestra propuesta no es detener y hacer esperar una supuestamente inminente independencia hasta que llegue una supuestamente lejana revolución social [...] El debate real dentro de nuestro movimiento gira alrededor de cómo posibilitar a corto plazo la ruptura con la proclamación de una República en Cataluña. He aquí la pregunta clave: ¿Investir a Artur Mas y continuar dando en exclusiva el mando político de la autonomía y del proceso a CDC nos acerca a la independencia de una parte de la nación o nos aleja?». / Ler: BorrokaGaraiaDa