Condeno la actitud de los mayores legitimadores de esta violencia. La de los medios de comunicación, que hablan de una revolución social ante el hartazgo provocado por la corrupción, cuando los disturbios son impulsados por la ultraderecha y suceden en Ucrania o Venezuela. Los mismos medios que ahora hablan de violentos antisistema destrozando pequeños comercios, cuando la realidad es que, ante una provocación como la de ayer, jóvenes avocados a la miseria rompieron las cristaleras de grandes símbolos del capitalismo, como son sucursales de entidades financieras (entre ellas la que ayer trataba de llevar a cabo un desahucio en Santutxu) o establecimientos comerciales del grupo multinacional Inditex. (BorrokaGaraiaDa)
«Nazi-Maidan y golpe de estado en Ucrania», de I. TREBIÑO et alii (boltxe.info)
Los últimos y lamentables hechos acontecidos en el espacio post-soviético ponen de manifiesto que la voracidad imperialista
no conoce límites. De igual modo, el trato que la prensa occidental ha
dado al golpe de estado en Ucrania confirma la impresionante maquinaria
bélico-propagandística (sin ningún tipo de ética, ni de humanismo, ni el
más mínimo escrúpulo) a la que tendremos que hacer frente en futuras
luchas. [Assinam também este artigo J. K. Billelabeitia, A. Blas, J. Agudo, J. Metauten, N. Garro, B. Esteban e M. K. Albizu]
«A solidariedade com a Venezuela Bolivariana é uma exigência revolucionária», de Miguel URBANO RODRIGUES (odiario.info)
Na América Latina, da Argentina ao México, e na Europa (incluindo Portugal) multiplicam-se as iniciativas de apoio à Revolução Bolivariana.
No momento em que o imperialismo norte-americano, com o apoio da União Europeia, se esforça para impor à humanidade um projecto de dominação monstruoso, é fundamental para o derrotar compreender que a luta dos povos em defesa da sua soberania passa por um reforço do internacionalismo.