Indiferente ante las consecuencias de sus actos, Washington prosigue impertérrito dando lecciones de derechos humanos y democracia al resto del mundo mientras aplica, sin pausa, las tácticas del «golpe blando» en contra de quienes tengan la osadía de pretender gobernar con patriotismo y en beneficio de las grandes mayorías populares. El autoproclamado «destino manifiesto» de Estados Unidos es exportar la democracia y los derechos humanos a los cuatro rincones del planeta. Lo que hace, en realidad, es exportar criminales. (redroja.net)
«Migrantes, ciganos e untermensch», de António SANTOS (Diário Liberdade)
Não se pode usar arame farpado para cortar a carne de bebés que morrem de fome, mas pode-se fazê-lo contra «migrantes» que chegam para «pôr em causa os nossos sistemas de segurança social». Não se pode enfiar refugiados em campos de concentração, mas pode-se fazê-lo contra os «migrantes» que vêm destruir os «costumes europeus».