Cada vez está más claro que, junto a la destrucción y concentración de capital, las políticas de los gobiernos persiguen la destrucción de los sectores sociales que el capital no necesita como mano de obra y que considera un lastre porque consumen grandes recursos: personas mayores pobres, paradas pobres y enfermas crónicas pobres. Hay datos suficientes para afirmar que, a diferencia de lo que los gobiernos declaran, la eliminación física de estos grupos sociales constituye un objetivo y no una consecuencia «no deseada», pero «inevitable» de sus políticas. (insurgente.org)
«En torno al informe del Washington Post», de FARC-EP (lahaine.org)
cuál es el verdadero papel que esta oligarquía vendepatria concede en realidad a la Mesa de Diálogos y el Proceso de Paz con las FARC-EP, o a una eventual Mesa con el ELN, cuando está expuesta ante la opinión nacional e internacional la suma de intereses que impulsan la profundización del conflicto armado en nuestro país. Cuántas dudas deja sembradas el informe comentado sobre la voluntad de paz del Estado colombiano y su amo imperial.
«Que alguien pare este proceso de paz», de Borroka Garaia (BorrokaGaraiaDa)
Un proceso de paz requiere como mínimo de dos actores; Obviamente, las dos partes enfrentadas en ese conflicto. Generalmente, una tercera parte que a veces puede ayudar es la mediadora. Ésta es la estructura mínima que requiere todo proceso de paz. La implicación de todos los agentes enfrentados.
Una parte por sí sola no puede realizar un proceso de paz ya que no puede dar una solución duradera al conflicto unilateralmente ni puede traer la paz. Es importante resaltar la diferencia entre pacificación y proceso de paz. Pacificación es la eliminación progresiva de elementos de violencia en un conflicto, pero nunca es un proceso de paz